viernes, 19 de marzo de 2010
jueves, 4 de marzo de 2010
Dr Gustavo Goldsmorthi: ¿Perverso o mitómano?
Hace alrededor dos años y medio conocí, primero a través de mails y después personalmente, a un hombre que se presento como Emilio Rufo, dijo tener treinta años, ser ingeniero, viudo y con un hijo. Al poco tiempo me entere que su nombre es en realidad Gustavo Goldsmorthi, mucho tiempo después él mismo me dijo que en realidad su esposa está viva y recientemente conocí que es Ginecólogo y Obstetra y trabaja en el Sanatorio Allende y en la Clínica Nascentis. Estas tres fueron las mentiras fundamentales de una maraña infinita de falsedades, donde lo único cierto que salió de su boca fue la existencia su hijo.
Nos vimos pocas veces. Un día estábamos caminando y alguien lo saludo llamándolo Gustavo, en vez de Emilio y no nos volvimos a encontrar. Averigüé a nombre de quien estaba su celular y ahí me encontré con una primera mentira porque el titular de la línea era Gustavo Goldsmorthi. Sinceramente para mí fue difícil porque era mi primera experiencia de conocer personalmente a alguien después de contactarnos virtualmente y tuve tanta mala suerte que me cruce con este perverso mentiroso. Cuando unos meses después me escribió para pedirme disculpas se las acepte, el tiempo te hace olvidar y quería terminar con los rencores y cerrar definitivamente esa desagradable historia. Pero retorcido como es Gustavo, hace un año volvió a reaparecer, quería hablar conmigo y tontamente accedí a encontrarnos. En teoría su intención era sincerarse, y pedirme disculpas cara a cara. En esa conversación entre otras cosas me dijo que su esposa estaba viva y ella padecía Trastorno Obsesivo Compulsivo, y que él había comenzado un tratamiento psicológico. Me resulto difícil asimilar todo lo que me decía especialmente que es casado y no viudo. Una de las pocas preguntas que le hice fue si realmente era ingeniero y me dijo que sí, ahora sé que lo único que quería era seguir riéndose de mí. Por alguna razón inexplicable creí que esa vez era sincero. Pero ahora me topé con la verdad de que es médico y no quise seguir tragándome la bronca.
No tengo el conocimiento para decir si realmente es mitómano, él afirma que si lo es, pero estoy segura que es perverso porque cuando ya no existía ningún contacto entre nosotros y sabiendo como me habían afectado sus mentiras, volvió a buscarme solo por el placer que le produjo mirarme a los ojos, ver mi credulidad y mentirme nuevamente. No lo conozco en su desempeño profesional pero experimente en cuerpo propio la persona retorcida que es. Tal vez alguien lo piense antes de depositar su confianza en el Ginecólogo y Obstetra Gustavo Goldsmorthi que trabaja en el Sanatorio Allende y en la Clínica Nascentis.
Nos vimos pocas veces. Un día estábamos caminando y alguien lo saludo llamándolo Gustavo, en vez de Emilio y no nos volvimos a encontrar. Averigüé a nombre de quien estaba su celular y ahí me encontré con una primera mentira porque el titular de la línea era Gustavo Goldsmorthi. Sinceramente para mí fue difícil porque era mi primera experiencia de conocer personalmente a alguien después de contactarnos virtualmente y tuve tanta mala suerte que me cruce con este perverso mentiroso. Cuando unos meses después me escribió para pedirme disculpas se las acepte, el tiempo te hace olvidar y quería terminar con los rencores y cerrar definitivamente esa desagradable historia. Pero retorcido como es Gustavo, hace un año volvió a reaparecer, quería hablar conmigo y tontamente accedí a encontrarnos. En teoría su intención era sincerarse, y pedirme disculpas cara a cara. En esa conversación entre otras cosas me dijo que su esposa estaba viva y ella padecía Trastorno Obsesivo Compulsivo, y que él había comenzado un tratamiento psicológico. Me resulto difícil asimilar todo lo que me decía especialmente que es casado y no viudo. Una de las pocas preguntas que le hice fue si realmente era ingeniero y me dijo que sí, ahora sé que lo único que quería era seguir riéndose de mí. Por alguna razón inexplicable creí que esa vez era sincero. Pero ahora me topé con la verdad de que es médico y no quise seguir tragándome la bronca.
No tengo el conocimiento para decir si realmente es mitómano, él afirma que si lo es, pero estoy segura que es perverso porque cuando ya no existía ningún contacto entre nosotros y sabiendo como me habían afectado sus mentiras, volvió a buscarme solo por el placer que le produjo mirarme a los ojos, ver mi credulidad y mentirme nuevamente. No lo conozco en su desempeño profesional pero experimente en cuerpo propio la persona retorcida que es. Tal vez alguien lo piense antes de depositar su confianza en el Ginecólogo y Obstetra Gustavo Goldsmorthi que trabaja en el Sanatorio Allende y en la Clínica Nascentis.
En la página de http://www.nascentis.com/gustavo_golsdmorthi_algo_mas dice: El Dr. Gustavo Goldsmorthi es “casi un experto en historia mundial y argentina”, pues en cada momento libre leer de libros relacionados con estas temáticas. También disfruta del tiempo en familia, de los partidos de fútbol y de cocinar junto a su esposa. Sugiero que agreguen que el Doctor Goldsmorthi es perverso. Y ya que mencionan a su esposa podrían agregar que él le es infiel, porque seguramente no fui ni la primera ni la última mujer a quien le mintió enfermizamente respecto a todo y con la que tuvo sexo.
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